Así voy por la vida, con mi perfil de chica dura. Aparentando que nada me asusta, que soy capaz de hacer todo lo que quiera.

Y es que tal vez justo esto sea ser cobarde, negar que tengo miedo. Todos tenemos miedo, yo también.
Y a veces, mi perfil de chica dura se desvanece y me siento indefensa. Indefensa por no saber como enfrentar ese miedo, mi miedo.
Mi miedo es desaprovechar el tiempo. Resulta irónico tener miedo a algo que tú mismo puedes evitar, pero a veces no es tan fácil. Tengo miedo de dejar las cosas para mañana y que mañana ya no pueda hacerlas. Siempre me pasa lo mismo.
Tengo miedo de hacerme mayor y arrepentirme de un millón de cosas de las que sé que me voy a arrepentir.
Miedo de desaprovechar. Y ya no quizás tanto el tiempo, sino lo que hago con ese tiempo. A menudo lo malgasto en planear cosas que nunca hago por miedo. Al rechazo, al dolor, no sé.
Miedo de desaprovechar, sobre todo; esa capacidad que tenemos los seres humanos de dar cariño. Porque a veces no solo basta con querer, también hay que demostrarlo.
Esa frase tiene mucha razón, y se asemeja bastante a lo que escribí en la entrada :)
ResponderEliminarSin duda espero seguir escribiendo. Gracias por leerme y ánimo con tu blog! Un beso.
Supongo que es un tema bastante interesante:)
ResponderEliminarGracias por leerme tu a mí! Y sigue con tu pedazo de blog.